Tito Haute presentó en París su primera colección de joyas para niños y hombres

El diseñador y creador de contenido cubano Jorge Fernández, conocido como Tito Haute, participó en la Semana de la Moda de París con un debut que atrajo la atención internacional: la presentación de su primera colección de joyas para niños y hombres.

Con esta propuesta, el joven creador latino dio un paso decisivo en su carrera, abriendo una conversación sobre la relación entre herencia, sostenibilidad y diseño contemporáneo.

¿Qué presentó Tito Haute en la Semana de la Moda de París?

El contexto de la presentación otorgó a su trabajo una relevancia particular. En una pasarela donde predominan las grandes firmas y las colecciones femeninas, la propuesta de Tito Haute llamó la atención por enfocarse en un público poco explorado: niños y hombres.

Las piezas, concebidas a partir de un concepto de lujo responsable, fueron elaboradas con materiales reciclados y diseñadas para resaltar la identidad más allá de la ornamentación.

El creador planteó la joyería como un puente entre generaciones, recordando la importancia de los objetos cargados de memoria.

En su caso, la inspiración partió de unos pendientes del siglo XIX heredados de su tatarabuela, un elemento familiar que lo llevó a explorar la joya como símbolo de continuidad.

¿Cuál es el trabajo de Tito Haute?

Cada pieza se diseñó como un objeto versátil y cargado de simbolismo, que pudiera funcionar tanto como accesorio de estilo como recordatorio de pertenencia. En ese sentido, el creador se distancia de la idea de la joya como mero adorno, para plantearla como un elemento identitario.

El carácter innovador de la colección radica también en el cruce de disciplinas. Conocido por su presencia en redes sociales, Tito Haute llevó a la pasarela un trabajo que combina la sensibilidad digital con la materialidad de la orfebrería, trasladando su sello creativo de las pantallas a los escenarios de moda internacionales.

La presencia de Tito Haute en un evento de esta magnitud representa la llegada de nuevas voces latinoamericanas al diálogo global sobre el lujo. Su trabajo, en lugar de replicar modelos tradicionales, propone una mirada distinta: la joyería como memoria, como identidad y como espacio de reflexión sobre el futuro.