Problemas en las articulaciones de los perros, conozca los signos de alerta

La salud de los perros es una contante variable que no se puede dejar de atender, ya que los peludos necesitan de un cuidado oportuno para preservar su vida. En efecto, una de las afectaciones que comienzan a parecer conforme avanza la edad son los problemas en las articulaciones.

¿Qué son las articulaciones de los perros?

Las articulaciones de los perros son determinantes. Esto es porque los expertos en animales detallan que son las que permiten la flexibilidad del cuerpo, de modo que hacen posible caminar, saltar, entre otras acciones.

Teniendo en cuenta datos de los especialistas de AniCura España, las articulaciones trabajan en conjunto con los huesos de los caninos, razón por la que si no se encuentran sanas la movilidad física se ve deteriorada.

Si bien es cierto que las problemáticas con las articulaciones tienden a aparecer con las razas más grandes, ningún perro está exento de sufrir alguna complicación. Entonces, la principal recomendación es siempre realizarles chequeos a las mascotas, al igual que estar pendientes de aquellos signos que por más mínimos que sean marcan la diferencia.

Los signos que alertan problemas en las articulaciones de los perros

En la línea de la atención oportuna, los expertos dan a conocer que hay signos de alerta que se vinculan a posibles afectaciones en las articulaciones de los perros, los cuales son:

• Rigidez a la hora de moverse, mucho más si se intensifica cuando se llevan a cabo ejercicios físicos.
• Tras un descanso, el canino presenta dificultad para levantarse y posteriormente caminar.
• Movilidad reducida, que se traduce a que el perro no realiza ciertas actividades como antes.
• Se presentan complicacionesa la hora de saltar.
• Irritabilidad al papar.
• El canino no quiere tener contacto con nadie.
• Puede haber una reducción de apetito.

De no tratarse rápidamente los problemas de las articulaciones en los perros, los especialistas clínicos detallan que se presentan casos de fracturas, lesiones musculares y ligamentos distendidos.

Finalmente, lo que se puede hacer como plan de acción y prevención es mantener un registro del peso del perro, mantenerlo en óptimas condiciones físicas y visitar al veterinario las veces que sean necesarias.