¿A qué edad desaparece la felicidad en las personas? Esto dice la ciencia

Existe el imaginario de que la felicidad es una emoción que a través de los añosy la experiencia va creciendo. Sin embargo, investigaciones han demostrado que esto no es del todo cierto, pues según expertos hay una etapa puntual de la vida en la que ese sentimiento empieza a desvanecerse.

¿A qué edad desaparece la felicidad? Esto dice la ciencia

De acuerdo con el estudio realizado por el National Bureau of Economic Research (NBER), este momento en el que ya no se siente la misma sensación de bienestar ocurre a los 47,2 años.

La institución que se encarga de evaluar datos de miles de personas ubicadas en diferentes partes del mundo dio a conocer que, el bienestar de cada individuo sigue una curva en forma de U a lo largo de los años, la cual inicia en un punto alto durante la juventud y luego disminuye poco a poco a medida que se va envejeciendo, y, vuelve a alcanzar un punto alto hacia los 50.

Los resultados de dicho análisis afirman que esta condición no está determinada por la cultura o el contexto en el que está situada la persona, pues se analizaron grupos de personas de diferentes partes del mundo y se concluyó que sus costumbres y formas de vida no interfieren.

¿Por qué la felicidad en las personas empieza a desparecer a cierta edad?

Según expertos en el tema, existen múltiples razone se influyen en esta percepción de la felicidad durante la llamada ‘mediana edad’, los cuales están relacionados con crisis existenciales, frustraciones en el ámbito laboral, compromisos familiares, sensación de estancamiento o el hecho de sentir que hay metas personales sin cumplir.

Lo anterior, en la mayoría de los casos genera una disminución de entre el 5% y el 10% en el nivel de satisfacción respecto a lo que se ha logrado hasta cierta edad.

Pese al difícil panorama, no todo parece estar perdido para quienes cruzan por este periodo, pues así mismo, investigaciones han demostrado que luego de los 50 años, existe mayor claridad y por tanto, una etapa de plenitud y tranquilidad en la que empieza un proceso de aceptación y reflexión sobre lo vivido, y que lo está por venir.