Esta es la dura verdad que hay detrás de los que hablan mucho y nunca se callan

Hablar es parte esencial de la humanidad. Gracias a la comunicación mediante el habla, las personas han logrado cosas sorprendentes, pero también sucede que hay quienes no dejan de charlar por más que pase el tiempo.

Como las personas son diferentes y sus comportamientos, uno de ellos es cuando alguien no se calla y, por ende, tampoco deja de hablar. Desde la psicología, esto tiene una explicación e incluso significado.

¿Una persona que no deja de hablar es extrovertida?

En términos universales, se le relaciona la característica de extrovertido a quien no para de hablar, aunque eso tiene un abordaje más profundo psicológicamente.

Una publicación en El País de Uruguay aborda la variable de hablar y no callar. Según Olga Albaladejo, autora de 'Cuentos del Bien-estar', hablar en exceso no siempre quiere decir que se trata de una personalidad extrovertida o sociable; dependiendo el caso, es una forma inconsciente de regular emociones como la ansi3dad, el miedo o la inseguridad.

¿Qué significa que una persona hable mucho?, según la psicología

Mediante el habla de manera constante, hay personas que buscan llenar silencios incómodos, evitar pensamientos difíciles o sentirse en control de una situación.

Una de las variables más frecuentes de quienes hablan mucho y no se callan es la ansi3dad. La mencionada autora relató que cuando se siente nerviosas hablan, sin necesidad de poner un tema sobre la mesa.

Por otro lado, hay quienes lo hacen como una forma de evitar conectar con emociones incómodas, ya que hablar sin parar impide sentir, reflexionar e incluso bloquea al otro. De hecho, puede tratarse una técnica para darle un control a la interacción que se puede gestar en medio de una charla y así no recibir posturas que pueden generar malestar o son complicadas para afrontar, según el caso.

En resumen, son distintas las posturas catalogadas como "duras verdades" porque sucede que hay quienes se identifican con el significado de tener inseguridades y por esta razón no paran de hablar, al igual que puede tratarse una herida del pasado.