¿Con un hámster en casa? Todo esto debe saber para su cuidado

Un hámster es una gran opción para elegir como mascota. Son animales muy tiernos y que transmiten responsabilidad y cuidado.

Expertos los recomiendan como primera mascota, dado que sus cuidados son mínimos, pero también muy específicos. Tenga en cuenta aquí cuáles son los más importantes y que no puede pasar por alto.

Conoce tips para tener un hámster como mascota

Un hogar adecuado

La jaula es la opción más común a la hora de elegir un buen lugar para que el hámster descanse y pase sus días. Debe estar ubicada en un lugar fresco, con buena ventilación y lejos de la humedad.

A este roedor le gusta ejercitarse, por lo que debe disponerle un accesorio para tal fin; también se recomienda colocarle algunos juguetes.

A la hora de elegir la jaula, tenga en cuenta que existen de tres tipos: acuario, de plástico y de metal.

La de acuario es la que más recomiendan expertos y veterinarios; se consideran las más seguras y permite que el dueño vea en todo momento lo que está haciendo su mascota. Otro hecho relevante es que contienen la salida del sustrato, un material ubicado en el fondo de la jaula, y que podría ser perjudicial para el entorno.

Entre tanto, las de plástico o metal tienen un mayor espacio entre las barras, lo que podría ser riesgoso para la seguridad del hámster, incluso, propiciaría el ataque de algún depredador.

La alimentación

A la hora de elegir la comida para su hámster tenga en cuenta que debe ser balanceada. Estos roedores necesitan consumir mayormente semillas, hojas, frutos, vegetales y proteínas.

Expertos afirman que las frutas y vegetales son prácticamente indispensables para la alimentación, puesto que ayudan con el fortalecimiento del sistema inmunológico.

Por otro lado, lo que nunca debería darle de comer a su hámster son papas, berenjenas, frutos cítricos, ajo, cebolla y aguacate, al igual que chocolate, frituras y productos altos en grasa.

La limpieza

En primer lugar, expertos recomiendan no bañarlos; ellos suelen ser muy aseados, de hecho, constantemente limpian su cuerpo. Un simple baño podría desencadenar en un resfriado que para un animal de estos puede ser mortal.

Por ende, será suficiente con que asee la jaula regularmente, que implica cambiar semanalmente el sustrato y limpiar todos los rincones de la jaula o la casa elegida para él. Además, todo debe estar completamente seco antes de ingresar nuevamente el roedor a su hogar.